Ante el surgimiento de prácticas colaborativas de
aprendizaje, de la revalorización de entornos personales de aprendizaje, la
redefinición del papel del maestro, de los aprendizajes y la enseñanza, así
como la noción de institución; y de las ecologías de saberes que circulan y se
distribuyen en red, es oportuno preguntarse: ¿Cómo
intervenir el espacio público y generar experiencias de aprendizaje colaborativo?
éste cuestionamiento genera inquietudes y oportunidades frente a la
necesidad de determinar colectivamente nuevos procesos de aprendizaje, el
rediseño de la organización escolar y los formas de construcción de la
subjetividad de los nuevos individuos de la cibersociedad. (Tomado anteproyecto de investigación)